Alfonso Levet
Los apoderados de la escuela Crucero de Huaro, en Florida, están preocupados. Dicen que no han recibido información acerca de lo que pasará con el establecimiento, que resultó totalmente destruido por los incendios forestales.
Pese a que el lugar donde estaba la antigua escuela ya fue limpiado totalmente con maquinarias, ni los padres ni el único profesor del establecimiento tienen claro qué van a construir en ese lugar ni cuánto tiempo tomará.
La matrícula del recinto es de apenas seis alumnos, de entre 6 y 11 años, cosa no tan extraña en localides rurales, sin embargo el fuerte apego de los niños con el lugar les dificulta aceptar otra cosa que no sea la reconstrucción en el mismo lugar.
Falta información
Desde la Dirección de Educación (Daem) de la Municipalidad de Florida, Eduardo Utreras dijo que "vamos a fijar una reunión con los apoderados, pero la reconstrucción no sería tan pronto".
Una de las soluciones que baraja la dirección educacional floridana es transportar a los alumnos diariamente y a costo del municipio hasta la escuela de Ráhuil o a otro establecimiento del núcleo urbano de Florida, propuesta que aún no se decide.
Los apoderados saben que construir una escuela nueva puede tomar meses, y proponen ocupar una sede social como aulas para sus hijos. "Eso no sería posible debido a que no se cumpliría con los requerimientos ministeriales", expresó Utreras.
La presidenta del Centro de Apoderados, Nancy Campos, manifestó que la principal molestia radica en que "no nos han tomado en cuenta. Lo que necesitamos nosotros es que nos digan claramente si los van a trasladar o no. Los niños se ponen a llorar cuando uno les dice que van a tener que ir a otro colegio, están como traumados por todo esto que ha pasado", indicó.
Un caso similar en hualqui
Una situación similar sufrieron los alumnos de la escuela Agua Corta, de Hualqui, que también resultó totalmente destruida por los incendios forestales. Aunque también podrían tener clases en un lugar provisional, posteriormente el establecimiento reanudaría sus clases en el lugar de siempre, gracias a la donación de una escuela modular por parte del Hogar de Cristo, que comenzaría a construirse la próxima semana, según informó el seremi de Educación, Sergio Camus.
2 escuelas rurales fueron destruidas por los incendios. Una tercera resultó con daños parciales.