Conducir con poco combustible es peligroso para el motor, ya que la bomba de bencina siempre va absorbiendo el combustible que está al fondo del estanque, en donde se encuentra reposando algún grado de contaminación (partículas diferentes a la gasolina) y con el tiempo esto podría causarle daños al vehículo.

Por ejemplo, al poner tierra o polvo en un vaso de agua y dejar reposar, la contaminación se concentrará en la parte de abajo. El agua de arriba está limpia, pero cuando se va usando comienza a salir la basura; lo mismo sucede con los carros.

Además, el combustible se ensuciará en el caso que, por fatiga en los filtros de las dispensadoras del servicentro, se ingresa al estanque bencina mezclada con agua o partículas de polvo por mal sellado en la tapa de llenado.

El uso de poco combustible también provoca un mayor gasto en el vehículo, lo que junto al movimiento natural del auto y el calor, hace que el líquido se evapore más rápido. Así también sufren daño los componentes internos del motor, como anillos, pistones y cilindros. Además de los inyectores en los micro filtros y toberas de inyección, provocando variación en las emisiones de gases. Para evitar esto debiéramos llenar el estanque una vez y luego mantenerlo no con menos de la mitad de su capacidad, de esta forma el rendimiento será mucho mejor. Asimismo, ayuda a refrigerar la bomba de combustible y prolonga la vida útil del automóvil.