Pareja que cumplió 50 años de casados dio clave para ser feliz
Son un matrimonio de Chiguayante que tras cumplir su aniversario número 50 hace algunos meses, decidieron postular al beneficio "Bono Bodas de Oro", que a través del Instituto de Previsión Social entrega el Gobierno de Chile.
María Isabel Fernández y Luis Gutiérrez tienen una historia en común que comenzó en 1966, época en que decidieron unir sus vidas ante Dios. Esta ceremonia vino a concluir un período de concubinato y a iniciar un maravilloso matrimonio, que hoy en día, tras 50 años, se mantiene firme mediante la lealtad, el compañerismo y el amor que ambos entregan.
Esta pareja de Chiguayante es uno de los 1.006 matrimonios de la Región del Bío Bío que ha recibido el bono "Bodas de Oro", que a través del Instituto de Previsión Social entrega el Estado. "Estamos muy contentos y agradecidos por el gesto", dice ella.
"Es una platita que nos viene de lujo a ambos... Es hermoso que se valore a las personas que se mantienen casadas como nosotros (...) Cuando la fuimos a cobrar pasamos altiro a celebrar con una pichanguita en el centro. La demás platita la guardamos para otras cosas de la casa", añade su esposo.
-¿Cuál es el secreto para mantenerse juntos?
"La receta es que uno de los dos debe aflojar ante las situaciones. Porque si los dos van parejitos y diciendo: Quiero esto, quiero esto otro, no, no resulta nada".
-¿Y quién de ustedes aflojó?
"Yo... jajajá. Es que mi vieja tiene un carácter súper fuerte. Le gusta que las cosas se hagan a la pinta de ella. Entonces, prefiero agachar la cabeza y no pelear. A esta altura de la vida ¿para qué? Para nada".
"Eso es verdad -ríe ella-. Soy un poco mañosa y me gustan las cosas pan, pan, vino, vino".
"También nos favoreció harto es que nosotros trabajábamos harto y llegábamos en la tarde a puro regalonear, si al final no nos veíamos en todo el día. No había tiempo para pelear y pasar malos ratos", añade la mujer.
LA HISTORIA
La historia de estos abuelitos se remonta a sus años "mozos", cuando ella trabajaba en una reconocida tintorería penquista y él en una panadería del mismo sector. Su estilo de vida era totalmente distinto, sin embargo, un día cualquiera coincidieron en un mismo lugar y, desde aquel momento, nunca más se separaron.
"Nos conocimos porque teníamos unos amigos en común. Por harto tiempo, sólo fuimos parte del mismo grupo, nada más", cuenta Luis.
Incluso, el abuelito relata que durante esa época tenía planes de matrimonio con otra mujer. "Estaba enamorado de una joven que se llamaba Irene, con la que pololeé dos años y le pedí que se casara conmigo, cuya petición aceptó. Estaba tan feliz, que le conté de inmediato a mis papás", relata.
Ante tal anuncio, la familia de Luis viajó completa desde Cabrero hasta Concepción. A los pocos días, sus padres le tenían todo preparado para que se realizará el casamiento, sin embargo, la novia desistió de su decisión.
"Me las lloré todas, porque faltaba súper poco para la ceremonia civil. Además, un amigo me dijo que ella andaba con un taxista y que le pusiera ojo ahí. Entonces, más rabia y pena me dio la situación. Ese día cuando me dijo que no se iba a casar conmigo, no sabía dónde ir, qué hacer. No quería estar con mis papás. Ahí me acordé de la María, que vivía sola y a unas pocas cuadras de dónde estaba en ese momento".
-¿Y fue?
"Sí. Ella me consoló como buena amiga que era no más. Me dijo que iba a encontrar una mejor mujer para mí... De ahí se forjó una linda amistad entre nosotros".
Pasó el tiempo y las heridas de don Luis se fueron sanando. Al mismo tiempo, en su corazón fue creciendo el cariño que le tenía a su amiga María Isabel. "Pasábamos harto tiempo juntos en su casa, así que un día le pregunté: ¿Me puedo venir a vivir contigo? Ella me respondió que lo iba a pensar, que le diera dos semanas. Como no me dijo que no altiro, agarré mis cosas un día y me fui a vivir con ella, no más".
"A mí me costó igual en ese tiempo, porque yo tenía mi pololo en Santiago y me iba a ir a vivir con él, pero me llegó mi perrito antes y todo se acabó con el otro, jajá", dice María Isabel.
A los pocos meses de comenzar a convivir, la señora María quedó embarazada y ante este hecho, que los llenó de tanta alegría, decidieron sellar su amor contrayendo su matrimonio, el que, finalmente se efectúo el 3 de abril de 1966.
El bono
El beneficio "Bodas de Oro" que recibió el matrimonio Gutiérrez-Fernández es un bono en dinero que el Estado entrega a parejas o viudos que hayan cumplido 50 años de matrimonio. El monto se entrega una sola vez y se reparte en partes iguales a cada cónyuge sobreviviente. "El beneficio se solicita al Instituto de Previsión Social (IPS), una vez cumplido los 50 años de matrimonio, cuyo monto es de 297.490 pesos, que se reparte en partes iguales", comentó Patricia Saldías, directora del IPS Biobío.
- ¿Cómo se postula?
"Para postular se deben tener los 50 años de matrimonio. La pareja debe tener al día su Registro Social de Hogares que es súper importante, no sólo para postular a este beneficio, sino para postular a todos los que entrega el Estado. Asimismo, el matrimonio no debe haber terminado por una causal judicial. Ellos deben permanecer juntos, salvo que algunos se encuentre en un hogar de larga estadía que debe estar acreditado ante las autoridades competentes".
-¿No hay ninguna excepción?
"Sí. Por ejemplo, si una pareja solicitó el beneficio y posterior a esa solicitud uno de los cónyuges fallece, recibe igual su parte el que esté vivo".
El tiempo para solicitar el bono "Bodas de Oro", es de un año desde que la pareja cumplió el aniversario número 50. "Una vez que lo piden en el Instituto de Previsión Social, tienen seis meses para cobrarlo. Si no se cobra durante esos seis meses, el beneficio se pierde", puntualizó la directora.
"La paciencia y bajar el moño son parte de la receta para estar juntos"
Luis Gutiérrez,, esposo.
"He sido muy feliz junto a mi viejo durante todo este tiempo que hemos estado casados"
Maria Isabel Fernández,
dueña de casa
Los beneficiados durante este 2016
Durante este 2016, se han entregado 1.006 bonos "Bodas de Oro" en toda la Región del Bío Bío, cuya inversión fiscal supera los 299 millones de pesos. Las personas que quieran solicitar este beneficio se deben dirigir a los centros de atención que Instituto de Previsión Social tiene en la zona. Su horario de atención es de lunes a jueves desde las 8.10 de la mañana hasta las 17.00 horas. En tanto, el viernes es hasta las 14.00.