Tres de la mañana en Candelaria. El humo comenzó a llenar, poco a poco, el segundo piso de una casa ubicada en el pasaje 33. El primer nivel de la vivienda ya se había quemado, casi por completo, cuando los dueños de casa despertaron ahogándose por el olor y la falta de oxígeno. Lo primero que hicieron, contaron, fue tomar a su bebé de un año en brazos para protegerla. Según contó el padre, al mirar por hacia las escaleras, se dio cuenta de que estaban atrapados.
Tía los ayudó
El hombre, quien se desempeña como bodeguero de Evercrisp en Concepción, contó que "despertamos de madrugada cuando ya se estaba quemando todo. El incendio había comenzado en el primer piso y no podíamos salir. Comenzamos a pedir ayuda y por suerte mi hermana, que vive en la casa de atrás, tenía una escala telescópica. Ella la fue a buscar y la afirmó hacia la ventana en donde estábamos nosotros. Ya habían pasado unos cinco minutos desde que habíamos despertado".
La madre, de 28 años, bajó junto a la pequeña. A ese punto, relató el papá, el fuego ya había avanzado hasta la segunda planta. Para salir de ahí, explicó el trabajador, "tuve que saltar. Mientras mi señora iba por la escalera yo me descolgué por la ventana o si no, el incendio me alcanzaba".
Según explicó, hace cuatro años había ampliado la casa para darle más comodidad a su familia. Contó que, pese a la pérdida material, el ver a su esposa e hija a salvo, el dolor se fue de inmediato.
Voluntarios de Bomberos de San Pedro de la Paz concurrieron a la emergencia y lucharon contra el fuego. Las llamas llegaron hasta la casa de los vecinos a través del segundo piso, ocasionando también grandes daños.
Una ambulancia debió asistir a la madre y a su bebé, ya que ambas respiraron una cantidad importante de humo. Sin embargo, Carabineros de la Sexta Comisaría confirmó que sus lesiones fueron catalogadas como leves. A pesar de eso, la bebé quedó internada en el Hospital Regional de Concepción, según explicó el papá.
Ambas familias quedaron a la espera de la ayuda que, durante la noche, les comprometió la municipalidad de San Pedro de la Paz.
Rebrote
Durante la mañana de ayer, Bomberos debió concurrir, nuevamente, a Candelaria. Un rebrote del incendio causó preocupación entre los vecinos del pasaje 33. Además, el fuerte olor de gas proveniente de un balón, obligó a los voluntarios a realizar un procedimiento de extinción controlado del combustible. Al mismo tiempo, personal del Departamento de Investigación de Incendios trabajó para determinar las causas que originaron el siniestro de las dos casas.