Joven tomecino se adjudicó el título al mejor maestro de Chile
Mario Carvajal es un arquitecto de 28 años y ganó una competencia de 1.600 personas ligadas a la construcción. Participó en Santiago y gracias a sus conocimientos es reconocido como el Nº1. Contó su experiencia a La Estrella.
El mundo de la construcción es gigantesco, ya que en todos los rincones de las ciudades se está constantemente edificando. Edificios, carreteras u otras construcciones son el panorama común en los grandes asentamientos, por lo que lo integran un grupo altísimo de personas. Por ello, lo logrado por Mario Carvajal tiene un mérito tremendo. El tomecino participó en un concurso nacional y hoy es reconocido como "El Mejor Maestro de Chile".
El crack de la construcción contó de sus inicios, proyectos y la tremenda experiencia que vivió en la Estación Mapocho, en Santiago, cuando superó a más de 1.600 candidatos.
Empezó de niño
"Mi abuelo era carpintero, de los antiguos. Hacía ventanas, muebles y otras cosas con madera, era un ebanista", contó Carvajal, quien tiene 28 años y estudió Arquitectura en la Universidad del Bío Bío.
"Yo disfrutaba yendo a la casa de él porque me enseñaba cómo hacer las cosas y qué tenía que ocupar para que quedaran bien. Era demasiado entretenido", recordó.
Asimismo, no olvida el primer regalo que le hizo su abuelo, el cual falleció en 2010. "Un martillo y serrucho pequeño, eso me regaló mi abuelo cuando era niño. Es algo que atesoro demasiado y aún los tengo. Soy el único de los nietos que siguió su legado y estoy muy agradecido de haberme metido en este mundo", dijo.
Con sus primeras herramientas, rememora sus primeros pasos en la construcción, cuando sólo era un niño y disfrutaba junto a su querido abuelo. "Yo me entretenía desarmando cajones de tomates y después los hacía de nuevo. Agarraba cualquier cosa que encontraba e inventaba lo que se me venía a la cabeza", señaló.
Mario comentó que desde ese momento su vida se ligó a las construcciones, razón por la que decidió estudiar arquitectura en la universidad. Quería especializarse.
Empresa y concurso
Junto a su pareja Carolina, que también es arquitecto, formaron una empresa de construcción. Empezaron en Tomé, pero ha tenido tal auge que tuvieron que trasladarse a Concepción. Ese movimiento lo catapultó a la competencia organizada por Sodimac.
"Por el traslado de la oficina empezamos a comprar productos en Sodimac, porque estaba más cerca", comentó el joven arquitecto, añadiendo que "el vendedor que me atendía me contó del concurso y me invitó a participar".
Primero tuvo que llenar un formulario para la inscripción. 1.600 trabajadores de todo Chile se dieron cita en el torneo y posteriormente, Carvajal quedó entre los 150 finalistas.
"Fue un tipo PSU de la construcción y administración de empresas. De cierto modo, era una forma de profesionalizar a los maestros", dijo.
Luego fue pasando las etapas del concurso, hasta que le avisaron que quedó entre los cinco finalistas. "Nunca lo imaginé, fue muy sorpresivo. La idea era pasarlo bien y aprender lo que pudiera. Jamás se me pasó por la cabeza que ganaría", admitió.
En esa instancia, lo fueron a ver a su natal Tomé, donde grabaron un video promocional y él les mostró parte de sus trabajos. "Fue bien entretenido", subrayó.
Final en Santiago
"Nos invitaron a un hotel en Santiago, parecíamos rockstar, fue una experiencia nueva y muy entretenida. En ese momento ya me sentía ganador", señaló el tomecino.
En esa oportunidad, hubo un evento en la Estación Mapocho, donde los cinco maestros más capos del país compitieron para quedarse con el primer lugar. "La primera prueba fue una gimcana de la construcción. Cortar palos, clavar, pasar con una carretilla con agua por un palo chiquitito", contó.
Posterior a ello, tuvieron que armar un andamio. Aplicó todos los conocimientos que aprendió en su formación académica y en las obras en las que ha participado.
"Después hubo que presentar un modelo de caja de herramientas innovadora. Por tema de tiempo no pude armarla, pero presenté un power point bien entretenido", aseguró. También tuvo que hacer instalaciones eléctricas. El concurso buscaba al maestro integral.
"Al final hicieron una ronda de preguntas sobre el tema, que tenían un puntaje relacionado a la complejidad. Ahí me destapé", confesó.
Mario iba último en la clasificación, pero producto de sus conocimientos pudo repuntar y quedarse con el primer lugar de la masiva competencia. "No entendía nada", afirmó.
Como premio, se ganó una camioneta para su empresa y será el rostro de Sodimac por una temporada. "Estoy en mi minuto de fama. Me dicen que apareceré diciendo 'palabra de hombre' en la tele", bromeó.
El mejor maestro de Chile contó que los clientes le tiran tallas por el tema. "Me dicen que menos mal que me contrataron antes o ahora les cobraría mucho más", apuntó.
Un joven papá
Mario y Carolina fueron papás hace cuatro meses del pequeño Mariano, quien les cambió la vida de 180 grados. "Es una sensación increíble ser padres. Llegas de un día agotador y la sonrisa de tu hijo te hace olvidar todo lo malo", confesó.
Por lo mismo tiene claro lo que espera de su vida. "La idea es seguir creciendo como empresa y perfeccionando todo, para Mariano. Es una motivación gigantesca que tenemos y vamos a progresar para crecer como profesionales y familiarmente", comentó el capo.
"Nunca pensé que podría ganar. Me conformaba con pasarlo bien"
Mario Carvajal,, mejor maestro de Chile.
"Mi hijo es la motivación para hacer bien las cosas y seguir creciendo como profesional"
Mario Carvajal,
arquitecto tomecino.