Ducha eléctrica
El uso de la ducha eléctrica en el hogar es un tema tabú y se podría decir que parte de un mito urbano. ¿Se pueden instalar?, ¿están prohibidas?. El uso de la ducha eléctrica no está prohibido por la Superintendencia de Electricidad y Combustibles (SEC). El producto debe cumplir con un certificado de aprobación otorgado por una entidad que el SEC autorice, por tanto, si el artefacto las cumple, se puede comercializar e instalar.
El problema surge entonces con la instalación. La normativa vigente exige una serie de condiciones para hacer una instalación eléctrica y en este caso un poco más precisa, en zonas como el baño. Por un lado, está la distancia que debe tener una canalización eléctrica respecto de una cañería de agua caliente, que debe ser mayor a 15 cm. Y en segundo término están las distancias mínimas de seguridad que deben cumplir las intalaciones. No debe existir una canalización eléctrica a menos de 60 cm de una ducha en todo su contorno y a una altura no inferior a 2,25 metros.
De acuerdo a lo anterior la distancia en los lados de la ducha se puede conseguir, sin embargo, la altura, es algo más complejo.
De ahí nace esta controversia de que si se pueden instalar o no, ya que la ubicación de la ducha quedaría por debajo de la altura exigida. Si a esto le sumamos que la conexión de la ducha a la red eléctrica quedará expuesta a vapores y humedad.