Cuidado al comprar pescados y mariscos
Parte de las tradiciones de Semana Santa es el consumo de pescados y mariscos, pero si bien se trata de productos con alto valor nutricional, es importante prevenir y no lamentar intoxicaciones por su mal estado.
En este sentido, lo primero es comprarlos en lugares establecidos como supermercados o con resolución sanitaria, lo que garantiza que desde su extracción, conserva la cadena de frío y por ende, disminuyen los riesgos de descomposición. Recuerde siempre que pescados y mariscos deben estar a una temperatura que bordea los 0 a 3 ºC; es decir, la que se obtiene con refrigeración.
Si busca productos frescos, entonces deben estar vivos al momento de la compra, sin malos olores y reaccionar al contacto externo, ya sea cerrando las conchas en el caso de cholgas, almejas o choritos o con textura turgente en para los pescados. En este caso, deben ser consumidos inmediatamente, previa cocción, o guardarlos en el refrigerador por no más de 24 horas. Nunca consumirlos crudos.
Siempre es necesario extremar los cuidados en la manipulación de los alimentos. Antes de prepararlos debemos lavarnos bien las manos con jabón y abundante agua, y repetir esta operación al terminar. Lo mismo con los utensilios, con el fin de evitar la contaminación cruzada; es decir, el contacto entre utensilios y manos que puedan traspasar agentes contaminantes de uno a otro.