Esteban Rojas: el realizador local que se codeó con Patch Adams
Con el famoso médico y el hijo de éste recorrió el mundo durante cuatro años. Hoy, luego de vivir 8 años en Argentina, se desempeña como director en Woki Toki y prepara el viral "Tipos de amigas".
Recuerda perfectamente cuando, aproximadamente a los 13 años, un primo llegó con una cámara que sus papás habían traído desde Estados Unidos. Se volvieron locos haciendo parodias de películas que les gustaban en esa época. "Empezamos a filmar un día y no paré más", cuenta Esteban Rojas, director penquista que no sólo ha sido galardonado en el Festival de Cine de Valdivia, sino que también ha desarrollado una carrera llena de historias y que ahora, desde hace un año y medio lo tienen de vuelta en Chile, trabajando para Woki Toki.
Futuro desde chico
Para Esteban, que hoy sea realizador es parte de la genética. Su mamá estudió Arte en la Universidad de Concepción y siempre estuvo ligada a las pinturas, la artesanía y exposiciones. Creció rodeado de eso y sus abuelos también le inculcaron el tema artístico.
"Cuando chico leía harto, era un chico más bien solitario. El cine se dio como una conjunción de las artes, como la amalgama perfecta de todas las artes. De chico estuve en teatro. Recuerdo que en el Colegio Alemán tenía electivo de teatro, después me metí a clases de batería, de dibujo... hasta que llegó mi primo y la cámara".
A los 15 años decidió tomarse en serio su trabajo con la cámara y realizó el corto "Insomnia", el cual fue tan bueno que ganó, a los 16 años, el premio al Mejor Video Regional en el Festival de Valdivia.
"Ese fue un incentivo muy grande, porque me hizo tomar en serio la carrera. Así que llevo la mitad de mi vida en esto, o sea 16 años", señala Esteban, hoy de 32 años.
Agrega: "En esa época me empecé a juntar con Nicolás López, que en esa época también era joven y precoz, compartíamos los mismos intereses. Con él aprendí mucho. Comencé a viajar a Santiago, a trabajar juntos en cortos. Esa etapa de mi vida aprendí mucho, hasta que a los 18 años decidí venirme a estudiar cine a la capital. A mí familia no le gustó mucho la idea. Mi abuelo prefería que estudiara periodismo, porque la carrera no tenía tanto futuro como hoy".
Pero lo hizo. Se consiguió media beca, pues la carrera es cara. Habló con el director de la escuela de ese entonces, Carlos Flores, le mostró su trabajo y le gustó. Pagaba la mitad de la carrera, para lo cual trabajó en la misma escuela de cine.
Con Patch Adams
Era un joven inquieto, así que duró tres meses estudiando. "Me salí, porque quería hacer un largometraje. En ese momento no lo dimensioné, estuve a punto de grabarla. Se iba a llamar 'El Arca de Noé', nos habíamos conseguido actores enormes para la cinta como Paz Bascuñán, Blanca Lewin y Willy Semler, pero a dos días de empezar, se nos cayó un financiamiento. La verdad es que menos mal que no la filmamos, pues hubiese sido un desastre", relata.
Pero todo pasa por algo, ya que tuvo la suerte de conocer a un gran amigo, cuya amistad conserva hasta hoy: Zag Adams. "Éste era un gringo que tiene un padre muy particular que es Patch Adams. Empezamos a hacer algunas cosas con Zag, filmamos algunos cortos, porque él es muy apasionado por el cine y en un momento su padre le pide que lo acompañe a Camboya en un viaje que financió Angelina Jolie. Le pide a Zag que lo filme y como él necesitaba un ayudante, me llamó a mí", explica.
En ese entonces, tenía sólo 18 años y era la primera vez que salía del país. Pero no sería el primer lugar que recorrería con los Adams. Durante cuatro años hubo una seguidilla de periplos, pues Patch los contrató y viajaron con él por diversos lugares como Cuba, Rusia, China, Sri Lanka, Perú y Europa.
Según indica Rojas, "la idea era hacer un documental de Patch, pero lamentablemente eso no prosperó y terminó en nada. Es una verdadera lástima, pero el material está".
Para él esta experiencia fue a otro nivel. Añade que "conocer a esta tropa de gente fue increíble. Todavía es un sueño, porque yo era muy chico y más encima estaba filmando todo el tiempo, vi todo a través de la cámara".
Vida allende los andes
Después de todos estos viajes decidió filmar un documental con Zag y unos amigos sobre la vida de Miguel Barriga, de Sexual Democracia. En ese momento, no pudo terminarlo por diferencias creativas en el equipo y por otras razones que no recuerda.
Asimismo, cuando regresó al país, sintió que el país le quedaba un poco chico frente a todas las maravillas del mundo de las que había sido testigo, así que, confiesa, con su arrogancia juvenil decidió emprender rumbo a Argentina, donde "fui casi de visita, pero terminé viviendo 8 años".
Fue a aprender, inscribiéndose en algunos cursos. Encontró trabajo y gracias a los Festivales Corto 1 y Corto 2 que realizó en Concepción, logró reactivar un nexo que tuvo con Farsa Producciones. "Los contacté. Ellos estaban muy bien, haciendo videoclips y cine independiente. Nos juntamos, tuvimos muy buena onda y me contrataron como editor. Estuve en videos de bandas importantes como Attaque 77", cuenta, agregando que mediante ellos conoció la movida de cine fantástico independiente.
Se fascinó con ello y se sumergió en ese mundo. "Edité 10 películas como montajista, logré grabar mis propias películas, edité 'Experiencia Barriga y filmé 'Cichonga' y 'La casa por la ventana'", dice, comentando que la última película, que si bien se concibió en Argentina y muchos trasandinos estuvieron involucrados, se filmó en su casa en Concepción, durante tres meses.
Claro que, al otro de la cordillera de los Andes se exhibió en los cines, no así en la zona, donde "no me dieron mucha bola. La mandé a varios festivales en Conce y nadie la pescó. Pero igual está disponible en Youtube para que la vean", lanza.
De nuevo en Chile
Hace un año y medio, decidió volver con su mujer, Rocío (una actriz trasandina) a Chile, pues sentía que Argentina ya no era lo mismo y su país estaba mejor.
El regreso no fue fácil, muchos de sus amigos no le tendieron la mano y se habían olvidado de él. Pero los que sí lo recordaban lo insertaron en los pitutos que había, como grabar eventos.
Hasta que "un amigo de Argentina me dio trabajo en publicidad, empecé siendo asistente de producción en comerciales grandes e internacionales", cuenta. Sin embargo, añade, "un trabajo muy bueno que me levantó fue un llamado de Canal 13, cuando estuve trabajando con Sergio Nakasone en el área de reality desarrollando nuevos proyectos. Estuve el 2015 durante cuatro meses".
De ahí empezaron a llegar las pegas como director en Woki Toki, haciendo virales y videos internos, por ejemplo, para Coca Cola o Walmart. "Todo sin pituto de por medio", aclara.
El éxito seguiría, pues a fines del año pasado lo llamó el productor de la película de Jorge Alís para editarla. Conoció al humorista y su equipo, quienes le encomendaron hacer dos virales: el de Navidad y otro con Yolanda Sultana
"Tener el honor de trabajar con Jorge, es bueno, sobre todo porque yo no sabía que era tan famoso", manifiesta.
Ahora, se apresta para grabar un nuevo "video editorial", como le dicen en Woki Toki: "Tipos de amigas", adelanta Esteban Rojas, quien regresó con todo a Chile y con ganas de grabar un largometraje en Concepción, donde asegura tiene una deuda pendiente.
"Ganar el Festival de Cine de Valdivia fue un incentivo muy grande"
Esteban Rojas,, Director de cine, penquista
"Tengo una deuda pendiente muy grande que es filmar en Concepción"
Esteban Rojas,, director de cine, penquista
Lleno de proyectos
La vida profesional en Chile de Esteban Rojas está imparable. "Ahora estoy trabajando con Nicolás Copano, estamos haciendo algunos videos para internet MQLTV. Estamos viendo cosas simpáticas que no podemos adelantar mucho. También voy a dirigir un programa para Canal 13 Cable, que se llama "Metropolibros", que conduce Gregory Cohen", cuenta el director penquista, quien también realiza un taller de cine de guerrilla, el cual explica cómo hacer cine con pocas lucas, tal como él lo hizo. "Por ahora estoy concentrado en el presente. Pero me gustaría volver a hacer un largometraje. Tengo una deuda pendiente muy grande que es filmar en Concepción. Me gusta la locación, sus paisajes, aunque no decido qué hacer", dijo.