Cientos de choreros despiden a víctima de femicidio en el cerro
Familia de Magali espera seguir adelante en honor a la dueña de casa, pese al dolor que deja su partida.
Una caravana de más de trescientas personas acompañó, ayer por la tarde, a Magali Carriel Garrido, la dueña de casa de 63 años que fue víctima de un femicidio en el cerro Zaror. Su historia, que alcanzó connotación nacional por haber sido atacada en la víspera del Día de la Mujer, caló hondo en el corazón de los choreros y vecinos del sector chorero, quienes llegaron en masa hasta el Cementerio Nº 2 del puerto. La despedida fue sencilla, emotiva y llena de muestras de afecto.
Los deudos salieron a las 15.30 desde la calle La Serena y, entre llantos y recuerdos, siguieron la carroza fúnebre que transportó a Magali desde su barrio hasta su lugar de descanso eterno. Avanzaron con calma en dirección a Las Industrias y, 45 minutos más tarde, la multitud arribó al camposanto.
Palabras finales
Dentro del cementerio ya había más de 50 personas aguardando a la fallecida, cuyo ataúd rodeado de flores, fue dispuesto en la entrada del recinto. Allí, sus familiares más cercanos agradecieron el cariño de todos los presentes en las últimas horas y aprovecharon la oportunidad para expresar sus más profundas reflexiones y sentimientos en torno a lo ocurrido.
Andrés Carriel, pastor evangélico y hermano de Magali, destacó la presencia continua de la familia del esposo de la mujer, durante el difícil momento, pese al lamentable desenlace que tuvo el matrimonio. "Hay que recordar que tanto ellos como nosotros se ven afectados por lo que ocurrió. El que ellos nos hayan acompañado da cuenta del amor que le tenían a nuestra hermana", indicó.
Otro de sus hermanos añadió, durante las palabras finales, que "ojalá podamos olvidar todo lo malo. Rescatar todo lo bueno y continuar con nuestras vidas". Con ello dio cuenta de que esperan vivir honrando la memoria de la dueña de casa, a quien recordaron como una mujer íntegra, llena de buenos valores y con una profunda fe cristiana.
Por su parte, sus hermanas de la Iglesia Pentecostal, que la visitaban en casa desde que quedó postrada por un accidente vascular, rememoraron los buenos días que pasaron con ella, en especial cuando cantaban en los coros.
En prisión
Cabe señalar que el imputado por el crimen de la vecina del cerro Zaror, su marido, se encuentra internado en prisión preventiva en la cárcel El Manzano. El hombre fue retenido por familiares de la víctima luego de encontrar el cuerpo sin vida de la mujer. Durante su control de detención, la fiscal Ana María Aldana lo formalizó por el cargo de femicidio consumado, basándose en informes de la PDI, evidencias, exámenes médicos y testimonios. Por su parte, el defensor penal público Mauricio Maza, alegó la atenuante de que el hombre pudo haberse encontrado ebrio o desorientado. Finalmente el juez lo envió al recinto penitenciario.
63 años tenía Magali. Hace uno, había quedado postrada por un problema vascular.