Juan Fariña López
Se perdió toda la temporada pasada por una rebelde lesión, pero este 2016 partió con borrón y cuenta nueva para Sebastián Roco. El defensor central está tiqui-taca físicamente y se siente motivado para volver a proteger el fondo del Campanil, donde lo extrañaron bastante durante su prolongada ausencia.
De la pretemporada de los auricielos y sus sensaciones, "La Roca" apuntó que "los trabajos están dirigidos en relación al desgaste que tuvieron los muchachos en el torneo anterior. En lo personal me siento bien, he adquirido un poco más de condición en lo futbolístico y estoy preparado para afrontar este campeonato del lugar que sea. Las ganas que tengo por jugar son enormes y lo debo demostrar en los minutos que me toque entrar, quiero pelear un puesto en el once titular".
Su ausencia
Lo que alejó a Roco de las canchas fue un tratamiento fallido de células madres, producto de una dolencia en una articulación de su rodilla derecha.
"Lamentablemente el asunto no funcionó. Era algo rutinario para acelerar mi recuperación, pero al final fue para peor y me perdí todo el semestre. Mi rodilla se inflamó más de la cuenta, tuve que hacerme una limpieza y me costó volver. Por eso trabajé los últimos dos meses y alargué un poco más mi recuperación, para ahora hacer una buena temporada y dejar en el olvido mi lesión".
Del clásico que la UdeC jugará con los acereros, mañana a las 19:30 horas en el CAP, Roco comentó que "Huachipato es un equipo duro, que nos van a salir a presionar para provocar nuestro error. Sabemos cómo juegan y queremos neutralizar su táctica con movilidad y triangulaciones en la salida".
1,88 metros mide el espigado Roco, que cumplió un año defendiendo los colores de la UdeC.