Equilibrando la batalla contra los roedores
La llegada de las altas temperaturas trae consigo las plagas de ratones. Esto conlleva una serie de riesgos, pues los roedores son transmisores de más de 35 enfermedades, algunas tan letales como el hantavirus. Además, causan otra serie de molestias y perjuicios a la población, especialmente en las zonas rurales. Sólo algunas recomendaciones básicas: hacer una buena exclusión, cerrar todas las aberturas en techos, ventanas, paredes o puertas que superen los 4-7 cm de diámetro. Retirar del entorno toda posible fuente de alimento y realizar tareas de ordenamiento y saneamiento ambiental.
Si se sospecha de presencia de roedores del tipo colilargos o de campo en el interior de las viviendas o depósitos, se recomienda estrictamente no barrer ni levantar polvo para evitar formación de aerosoles con virus. Ingresar a estos lugares cerrados con la boca y nariz cubiertos, lentes de seguridad industrial y guantes. Desinfectar con agua y cloro, rociando sobre lugares con excrementos u orina. Abrir las ventanas para que entre luz y retirarse por varias horas hasta que el desinfectante haga efecto.
Si observa roedores muertos, no tocarlos. Preparar agua con cloro y mojarlo bien. Luego de 24 horas se puede recoger con guantes e introducirlo en doble bolsa de polietileno. Luego se entierran o queman en un lugar apartado de la vivienda.
Marcelo Hoyos