Canes encontraron droga en cárcel con súper olfato
Mario Saavedra Ponss
Pese a que intentaron burlar los controles de Gendarmería, unos sujetos que buscaron ingresar droga a la cárcel El Manzano, no lograron engañar el olfato de la unidad canina del penal. Uno de los perros logró encontrar, dentro del palo metálico de una escoba, pequeñas cantidades de marihuana y cocaína pura. Además, desde el penal se reveló una serie de insólitos hallazgos que han detectado los animales con su súper olfato.
El suboficial Pedro Zabala Salgado relató que "dentro del espacio ahuecado detectaron 76 gramos de marihuana y seis de cocaína. Estos hallazgos se han ido repitiendo en varias oportunidades".
"Por ejemplo, hace unas semanas, pillaron droga dentro de un trozo de madera que iba a ser utilizado como material de trabajo por los internos. Sin embargo, estas personas previamente habían cortado y ahuecado el palo, colocando chips, celulares y sustancias ilícitas como pasta base. Fue un trabajo minucioso porque lo pegaron y lijaron, por lo que no se veía nada a simple vista", detalló.
Según contó Zavala, los animales de la unidad entienden su trabajo como un juego. Durante ocho meses, se les adiestra para encontrar un compuesto químico con un olor similar al de la droga. Cada vez que lo encuentran, se les da un premio para reforzar que se hizo algo bueno. "Al detectar una droga en un paquete o encomienda, el perro se sienta. Es muy difícil que puedan engañarlo, porque ellos se concentran en dar con sólo un aroma", explicó Zabala, agregando que el humano "percibe a través de un promedio de 5 millones de células olfativas, pero que el perro lo hace por medio de 250 millones". J
Siguiendo algunos mitos, las visitas al recinto penal buscan engañar a los canes. Por ejemplo, según explicó Pedro Zavala, "introduciendo la droga dentro de cebollas enteras, o también la dejan dentro de tarros con café, porque son olores fuertes. Pero no hay forma de confundir al perro. Eso la gente tiene que tenerlo claro", enfatizó.