En alerta están penquistas por la erupción del volcán
l Cecilia Bastías Jerez
"Nos han dicho que hay que tener cuidado. El volcán Calbuco es traicionero, no avisó, sólo hubo un temblor casi imperceptible antes de la erupción", afirmó María Elena Jarpa, oriunda de Hualpén, quien vive actualmente en Alerce, localidad distante a unos 30 kilómetros de las faldas del macizo.
Aunque aseguró que el ambiente ayer era de mucha más tranquilidad en el lugar que para el miércoles, igualmente se encuentran expectantes a lo que pudiera ser una nueva emergencia con la necesidad de evacuar. "Uno no sabe de qué forma, en un minuto, se vaya a comportar el volcán", dijo.
"No hemos tenido problema de material particulado porque nos beneficia el viento", añadió.
preparados
Lissette Silva, quien vive en Puerto Varas y es originaria de Concepción, aseguró que ayer la situación estuvo mucho más calma que el día anterior, el que describió como un caos.
Silva detalló que tardó tres horas en llegar a su casa de Puerto Montt a Puerto Varas, trayecto de no más de media hora, habitualmente.
"Estamos atentos a que puede haber otra erupción, estamos todos en general, preparados con un bolso por si es necesario evacuar", indicó.
En cuanto a las molestias por la columna de cenizas, Lissette señaló que no han tenido problemas por el humo.
Juan Pablo Riquelme, también penquista, vive en Puerto Montt y trabaja como funcionario público. Declaró que la zona de Ensenada está bastante afectada por la piedrilla, que dejó calles anegadas.
"El servicio de agua potable se ha mantenido normal, se hizo llamado a la precaución a comunas como Puerto Octay que tienen fuentes de agua superficiales, pero en Puerto Montt son napas subterráneas", comentó Riquelme.
En tanto, Macarena Curimán, indicó que durante la mañana del jueves hubo baja presión del agua y que junto a su familia está atenta a la reacción del volcán. J
l Lamentablemente este grupo de penquistas en el sur manifestaron que en ciertos servicios y productos detectaron una drástica subida precios. En la movización colectiva y de taxis, según María Elena Jarpa fue notorio el cambio en el valor de los viajes. Por su parte Lissette Silva señaló que en los supermercados no había agua ni pan.