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En su semana más crítica, con el recuerdo del Superclásico y casi eliminada de Copa Libertadores, la U comenzó ayer a enmendar en algo el rumbo perdido en los últimos cuatro meses. Lo hizo a costa del Palestino de Pablo Guede en Santa Laura y gracias a dos jugadores que regresaron a la vida.

Volvió, literalmente, Waldo Ponce. Y volvió también, casi literalmente, Gustavo Canales. El central reemplazó en el 37' a Benjamín Vidal y pisó, después de siete meses de para, una cancha de fútbol. Mientras que el delantero marcó dos veces y recuperó, en algo, el nivel que tuvo hace algún tiempo y que no había podido exhibir en 2015.

La U no fue superior. No puso a Palestino en su arco. Ni se creó, tampoco, una infinidad de oportunidades. Fue, de hecho, un partido parejo. El local mantuvo la posesión e intentó, como acostumbra el equipo de Guede, hacerla rotar de forma incansable. La visita, sin embargo, fue más eficiente: llegó poco pero convirtió tres veces.

A los 12' Guzmán Pereira le robó una pelota a Diego Rosende en la entrada del área y definió casi sin oposición para marcar el primero. Más tarde, cuando se jugaba el quinto de agregado del primer tiempo Canales aumentó con un tiro libre de 25 metros. Y a los 64', nuevamente Canales -esta vez aprovechando otro error de la defensa local- derrotó con un globito al arquero árabe.

La U ganó su cuarto partido del Clausura, sumó 14 y limpió, en algo, su deteriorada imagen. Aun así, sigue siendo 13°. Demasiado poco para el campeón vigente. J