Basura y vidrios preocupan a visitantes de playas de Penco
l Constanza Rivera Rivera
Para muchos, las vacaciones son sinónimo de despreocupaciones y relajo en la playa, pero si al caminar por la arena se topan con restos de botellas o latas, el descanso puede tornarse una molestia. La basura en las playas, así como la falta de preocupación de los propios visitantes al no ser cuidadosos con dónde arrojan sus desperdicios, es un tema que incomoda a los veraneantes en sectores como Penco y Lirquén.
"Nosotros siempre venimos para acá por lo tranquilo que es", sostiene Silvia Sáez, quien viaja desde Yumbel con su familia desde hace años a disfrutar del mar en Penco. "Lo único malo es que el mar está lleno de algas y también hay hartos vidrios, lo que es peligroso cuando uno anda con niños, porque se pueden lastimar, o incluso para uno mismo es un riesgo", añade la visitante.
Similar situación llamó la atención de Soledad Muñoz, quien luego de varios años sin ir a Penco, según contó, visitó la playa junto a su hija de 4 años. "Se ve mejor que antes, está bien arreglada y hay juegos infantiles, pero también se ve harto vidrio roto, sobre todo en la parte del fuerte, y latas de cerveza", sostuvo. "Por último, si vienen a tomar a la playa, que tiren las botellas a la basura y no las rompan acá (...) Aquí los niños andan a patita pelada, entonces es peligroso", añadió, subrayando la importancia de que todos contribuyan a mantener limpio el lugar.
Aunque en su mayoría los veraneantes reconocen el cuidado que se ha puesto en el popular balneario, no esconden su molestia por este tema. "Siempre vengo a veranear para acá, aunque esté feíta la playa, hay que reconocer que está mejor que antes", indicó María Ramírez, quien hace 25 años veranea en Penco, y quien de paso manifestó su preocupación por un inmueble abandonado cerca de la playa.
"Esa construcción que se ve por allá es horrible, da miedo pasar por allá, deben andar hasta guarenes. Deberían preocuparse de eso, le quita puntos al sector, que no está mal cuidado como otras playas, pero podrían hacer algo con eso", agregó.
la cata
Otro de los sectores favoritos en la comuna durante el verano es la playa La Cata, en Lirquén, una playa rocosa y angosta ideal para pasear y donde se puede bañar sin mayores problemas.
Sin embargo, la limpieza del lugar también preocupa a los visitantes. Para David Aguayo, esta playa es ideal para pasar las mañanas, "pero hay días y horas específicas en la tarde que es casi imposible pasar por acá, el olor repulsivo de la basura es insoportable, no vienen a retirar hasta la noche, y con el calor va saliendo el olor", se lamentó.
A juicio del veraneante, el municipio no se preocupa tanto de Lirquén y sólo se enfoca en Penco. "A Lirquén lo tienen botado, deberían sacarle provecho al lugar, es bonito, sólo falta preocupación de las autoridades", subrayó. "Y de la gente, también, que no se preocupa de retirar la basura que va generando. Esto es cincuenta y cincuenta", añadió.
Precisamente, uno de los limpiadores de la playa hizo ver que pese al trabajo que realizan a diario, muchas veces son los visitantes los que no ayudan a mantener la limpieza del lugar. "Nosotros no podemos hacer más. En la mañana dejamos todo limpio, pero es en la tarde que acá ensucian todo y nosotros no podemos estar limpiando en medio de la gente, si no también se molestaría por eso", indicó. "Este año estamos limpiando de lunes a domingo, antes era sólo de lunes a sábado, algo se ha avanzado, nosotros no podemos hacer más si la gente no cuida", agregó el trabajador.
seguridad
Para David Aguayo, otra preocupación en el sector de La Cata es "el tema de la seguridad de la playa, acá uno no puede salir después de las diez de la noche, es imposible. Fuman de todo, toman de todo y nadie hace nada", reclamó.
Carla Yancao, quien vive a una cuadra de la playa, afirmó estar al tanto de todos los problemas que se originan durante la noche en el lugar. "Uno llama a carabineros, pero no vienen nunca. Nosotros escuchamos todas las peleas de los que vienen a tomar acá, estamos a la deriva de la delincuencia en cualquier momento", indicó la vecina.
"Uno quisiera venir en la noche a ver el mar, tomar un mate aquí en la orilla tranquila, como antes. Antes uno podía venir hasta tarde en la noche, pero ahora es imposible estar acá después de las 10 de la noche", agregó.
limpieza
Desde el municipio de Penco, el alcalde Víctor Hugo Figueroa, señaló que en el caso de la playa La Cata, no se puede hacer más de lo que se ha avanzado en estos años. "Durante el día se acumula la basura, y en la tarde el camión pasa a retirar, porque el acceso es muy complicado para que haga dos viajes durante el día, entonces preferimos que sea en la noche para sacar lo acumulado durante el día", explicó.
Asimismo, sobre los desechos de vidrios que se encuentran en la orilla de playa de Penco, el edil sostuvo que "creemos que son restos de loza de la empresa Lozapenco, hace 20 años que la empresa no arroja desechos al mar, pero es imposible de evitar que el mar devuelva esto". "Se ha limpiado el mar, pero constantemente lo vuelve a arrojar, es como el caso de las algas, siempre aparecen por mucho que se limpie", añadió.
Finalmente, sobre al inmueble abandonado que genera temor en vecinos y visitantes, el alcalde Figueroa indicó que "estamos en conversaciones con Serviu, porque esa construcción pertenece a ellos. Lleva más de 15 años abandonado, en estos momentos estamos pidiendo la demolición de este edificio que está sin uso, o si no, la remodelación". J
l Los visitantes de la playa de Penco se llevaron ayer además un tremendo susto, luego de que un grupo de turistas y niños pillaran unas medusas de gran tamaño a la orilla de la playa. Muchos de los presentes ya conocían de lo peligroso que es el contacto de esta especie con la piel de las personas, así que de inmediato dieron aviso a los jóvenes encargados de la seguridad de los bañistas. Usando palas, las dos medusas fueron sacadas de la orilla. Una situación similar ocurrió en Tomé.
"Estamos
pidiendo la
demolición de
ese edificio que
está sin uso"
Víctor Hugo Figueroa,