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Se ganó sufriendo, pero también como le gusta al hincha de Deportes Concepción, luchando y metiendo hasta al final, sin dar una pelota por perdida y buscando hasta que las piernas no dieran más, dejando todo para la alegría del tablón.
Así se vivió el triunfo del Conce ayer en Hualpén, el segundo en fila, donde el León de Collao debió sacar sus garras y picar desde atrás para revertir el marcador y dejar los puntos en casa ante el Morning del ex lila Patricio Almendra.
El arraque para el Conce fue algo enredado, donde el viento en contra, la poca claridad y el mejor manejo de la visita complicaron a los de Ribera. Sin embargo, fue el Conce el que llegó con más peligro, siendo lo más polémico un par de penales, primero uno que no cobra el juez en contra de Rojas, y luego uno sobre Bustos, cobrado por el árbitro, pero luego dejado sin efecto, pues el zurdo estaba adelantado.
Con garra y viento
Se fueron en cero al descanso, pero en la reanudación de las acciones, vendrían las emociones.
El equipo del Pato pegó el primer golpe, cuando a los 54', Servín se mandó un desborde por la derecha, para sacar el centro y dejar solito a Concistre, quien venció al pelado Limenza.
Pero el Conce no bajó los brazos y emergió eso que reza en su lema, fuerza, garra y corazón, para picar de atrás e ir por la hazaña, apoyado también por el viento a favor, que ayudó a empujar más a los lilas. Los minutos pasaban y el público se impacientaba, hasta que apareció la derecha de Gamadiel, quien aprovechó un remate a medias del recién ingresado Sarraute, para poner la paridad.
Los hinchas se prendieron aún más, lo mismo que el León, que siguió buscando, a esa altura con más ganas que fútbol. Hasta que en los descuentos, un tiro de esquina servido por el mismo Sarraute, fue empalmado de primera por Gaete, quien estaba debutando con la casquilla lila, para desatar la locura en el tablón, dejar los puntos y mandar al Conce al tercer lugar de la tabla.
"Una alegría tremenda, el técnico se la jugó por mí, este es un plantel extraordinario que nunca baja los brazos, creo que hoy (ayer) quedó demostrado", dijo tras el partido el autor del gol del sufrido triunfo, quien reconoció que en el camarín uno de sus compañeros le dijo que con un gol suyo ganarían, y así no más ocurrió. J