l Edson Rebolledo Sáez
Caras largas y conversaciones en inglés era lo que más se podía ver y escuchar ayer en el aeropuerto Carriel Sur. Y es que producto de la intensa neblina, sumado a la inoperancia que afectará de octubre a marzo de 2015 a los sistemas de monitoreo ILS3 del aéreo terminal de Santiago, varios fueron los vuelos internacionales que, por emergencia, tuvieron que llegar hasta Concepción.
Fuera de la incomodidad que implica salirse de la ruta y de los atrasos a los destinos, los pasajeros extranjeros que fueron llegando hasta el aeropuerto local denunciaron una serie de situaciones complicadas vinculadas a largas esperas, falta de soluciones ante la problemática y una total desatención de parte de las aerolíneas respecto a las comodidades mínimas tras lo acontecido.
"Al final nos van a mandar un bus que llegará acá a las 5.30 de la tarde, esa es la solución que nos dieron. Nos dieron almuerzo y tuvimos varias horas arriba del avión sin recibir instrucciones de lo que debíamos hacer. Esperábamos llegar a las 9 de la mañana a Santiago y vamos a llegar a la una de la madrugada", dijo José Holowaty quien viajaba en el avión de American Airlines con ruta Dallas-Santiago.
Pero esta situación no sólo afectó a los pasajeros de vuelos internacionales, pues fueron varios los viajes de nivel nacional que también se vieron con problemas similares.
aeropuerto
Respecto a la situación ocurrida en Carriel Sur, el jefe de Dirección General de Aeronáutica Civil de Concepción, Andrés Murillo, explicó que "hemos estado recibiendo vuelos nacionales desde las 2 de la madrugada (ayer) y durante la mañana llegaron tres vuelos internacionales (...), hemos intervenido como aeropuerto, para que los pasajeros pudieran bajar, estirar las piernas, comer, mientras llega la solución de las aerolíneas". J
l El jefe del aeródromo Carriel Sur, Andrés Murillo, explicó que varias de las complicaciones de los pasajeros se fueron incrementando debido a que la mayoría de las tripulaciones de los vuelos internacionales llegaron a la zona cumpliendo la totalidad de sus horas de vuelo y, por ley, no pueden volar hasta tener un relevo. "Eso complicó bastante la situación de varios vuelos", aseguró.