Monumentales problemas se vivieron en las principales avenidas de la ciudad y en las céntricas calles de Concepción.
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Indignación. Es la palabra que mejor resume lo que durante la tarde-noche de ayer se vivió en las principales calles y avenidas del Gran Concepción. Tacos en diversos puntos de la ciudad, bocinazos, garabatos y una molestia generalizada fue la tónica a la hora en que miles de personas regresaban a sus hogares o hacia los sitios en donde pensaban pasar un rato de diversión.
Aunque es casi habitual que las tardes de viernes la ciudad deba soportar un caos vehicular, lo que se vivió ayer escapó de todo límite. Trayectos que habitualmente se realizan en diez o quince minutos, ayer tomaron más de una hora, situación que se vio particularmente compleja en sitios como la avenida Los Carrera, Paicaví, Jorge Alessandri, Pedro Aguirre Cerda, entrada al sector de Lomas de San Sebastián y la Ruta 160.
Sin embargo, una de las situaciones dignas de destacar sucedió en la céntrica calle Caupolicán, donde el colapso en el tránsito dejó prácticamente sin poder salir a los automovilistas que ocupaban un estacionamiento subterráneo ubicado en el lugar.
"Llevo más de una hora parada, sin poder avanzar, decidí apagar el motor porque no nos movemos. Nos dicen que hay espacios, pero el taco de calle Caupolicán impide que los otros autos puedan salir y nosotros entrar", comentó Miriam Riffo, una de las conductoras afectadas por la congestión.
"Nunca me tocó vivir una situación así, jamás estuve tanto rato parada acá. A mediodía también pasó lo mismo, no entiendo porqué no ha llegado carabineros", agregó la conductora Fernanda Gutiérrez.
Una situación similar se vivió cerca del mediodía de ayer, lo que incluso motivó la presencia de carabineros en el lugar. El tránsito tuvo que ser detenido en Caupolicán con el propósito de que el flujo vehicular se volviera a normalizar y los autos pudieran salir del subterráneo. J
