Cuartel teutón sufrió con la farra de los nacionales
Voluntarios de la 7ª compañía de bomberos lamentaron la derrota.
l M. Muñoz - C. Paz
Se tomaban la cabeza, se tapaban la cara y más de algún improperio se les salía a los muchachos de la 7ª Compañía de Bomberos de Concepción, al ver cómo la Roja llegaba y llegaba sobre la portería alemana, pero no lograba vulnerar el arco defendido por Manuel Neuer.
Así vivieron el partido de ayer los voluntarios de dicho cuartel, donde el sello alemán invade cada uno de sus rincones, pues fue fundado por alemanes hace más de sesenta años, varios de sus integrantes tienen un antepasado teutón, y donde las costumbres germánicas, como el orden y la disciplina, se hacen presentes a cada momento.
Pese a ello, todos estaban con el equipo de Jorge Sampaoli, más aún al ver el buen juego nacional, que sobrepasó al germano, principalmente en el segundo tiempo, donde los presentes coincidieron, fue un resultado injusto.
"Chile jugó bien, faltó definición, pero se ve un equipo agresivo y no fue sobrepasado", dijo tras el partido Matín Bugmann, voluntario de ascendencia alemana, y que a sus 19 años lleva seis metido en el cuartel penquista-alemán.
"Vi bien a Chile, cómo jugó y cómo se planteó, más en el segundo tiempo. El resultado no es el más justo, me deja tranquilo sí el desempeño, pues Alemania es un rival duro, candidato al título. Pero me deja preocupado, porque los rivales del grupo son similares, como España y Holanda", agregó Benjamín Newman, otro voluntario que alentó ayer a la Roja.
Por su parte Claudio Ercoreca lamentó las múltiples ocasiones perdidas por los nacionales, asegurando que eso no puede pasar en Brasil 2014.
"Yo pensé que Alemania iba a salir a arrasar, pero no fue así. Hay que pensar que Alemania es una potencia, candidato al título, y en su casa", dijo este voluntario, a quien igual le quedó el gustito amargo de la derrota.
Matías Maodier (aspirante a bombero), Mauricio Peña, Joaquín Brucei, Víctor Aros y Nicolás Díaz, completaban el grupo de bomberos, quienes ayer, en medio del acuartelamiento, se pusieron la Roja en medio del oasis alemán en esta sexagenaria compañía penquista.
En la remodelada Vega Monumental, la esquina formada por los locales de Carnes Belén, Panadería Fray Luis y Carnicería Rouse fue un oasis donde los clientes, y los propios trabajadores, vieron con tranquilidad el lance, y en pantalla LCD extra grande colgada en medio del pasillo.
Haciéndole por un rato el quite al lomo que vendía a $7.290 el kilo, Luis Leal, de Sabro Carnes, comentó que "la derrota no fue justa, pues hicimos méritos de sobra al menos para el empate. Posibilidades hubo, pero ninguna la echamos adentro".
Omar Nova, del local de frutos secos y legumbres Don Omar, que tiene como ofertón el kilo de lentejas a $1.200, expresó que "la Roja del segundo tiempo es la que queremos ver. Ahí nos fuimos todos arriba, al ataque. Eso sí, Jorge Valdivia entró muy tarde".
Tras el mesón de Carnes Belén, y sin quitarle la vista al osobuco que vendía a $3.190 pesos, Jorge Torres indicó que "faltó disparo de distancia. Se jugaba mucho para atrás. A Alexis Sánchez lo vi bien, pero Eduardo Vargas estuvo bajo. No tenemos más". J
l Para no desentonar cuando Chile juegue en el Mundial, la administración de la Vega Monumental ya prepara una serie de eventos para que sus clientes vean los cotejos en el lugar. "Vamos a organizar asados, entretenciones varias", comentó Fabiola Jara, que es la encargada de Comunicaciones de la mega feria, la que cuenta con pantallas gigantes en varios lugares.